Ustedes vieron que el 2 de marzo empiezan las clases, ¿no?
Y que hace un par de semanas que las vidrieras de todo tipo de negocios, hasta las carnicerías, se poblaron de útiles escolares, en una actitud casi pornográfica. Mostrándose indecentemente, de a montones, cuaderrrrnos, lapiceeeeeras, reglassss, lapicitos de colores, gomas, cartucheras, anotadorrrcitos, blockcitos de papeeeeeel, resssmas, tijeriiiiitas, corrupt...digo, correctores, cajitasss de clipsss de coloresss, post-its fluorescentesss, resaltadorrres, lanzaminnnas...
¡Y YO SIN NADA QUE ESTUDIAR, LA MADRE QUE LO TIRÓ, MIERCOLE!
No puede ser, un poco de orden... ¡¡ya ni puedo caminar tranquila por la calle!!
Que alguien me sugiera algun cursito cortito, un seminarito de pocos meses, algo... (pero si no tengo ganas de estudiar, qué-estoy-diciennndo!!!)
Voy a tener que conseguirme una restraining order, si no despachurro el presupuesto de los próximos dos meses.
Encima ahora descubrí que, a la lista de lugares a los que NO debo ingresar (librerías - de libros y escolares - panaderías, kioscos), al menos despierta y con dinero, debo sumarle los bazares o negocios, tiendas, stores, que vendan tacitas, platitos, mugs, cubiertos, agarraderas, utensilios de cocina, fuentes, ollas, tuppers...
Ay, dios. Qué mal estoy.
¿Y si compras tan sólo un corrupt..., digo, un corrector y corriges esa debilidad?
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